Etiquetas

, , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Preámbulo.

Lanzan una propuesta para jugar con los textos y las palabras, con el arriba y abajo, defender una u otra opción, estar encima o estar debajo, no vale estar al lado y no posicionarse, hay que defender una postura, y tras un segundo de duda, me sumo al proyecto. Al día siguiente sin pensarlo mucho, me surge un texto, rápido, de manera fluida, y lo dejo descansar, y que repose para leerlo más tarde pasados algunos días, hay mucho tiempo hasta la fecha de publicación. A veces con la relectura te das cuenta de la “castaña pilonga” que has hecho, y estás a tiempo de rehacerlo de nuevo…  Una semana después lo leo y dudo si es digno del proyecto, lo veo… no sé, quizás demasiado…  y según lo pienso, sin darme cuenta me surge otro texto que me parece más, no sé…  Bueno no doy pistas de lo que me pareció cada uno de ellos, el caso es que tenía un problema, ¿Qué hacía? ¿Cuál publicaba?…

Llevo meditándolo cuatro días y he llegado a la conclusión de que voy a publicar los dos, al fin y al cabo son complementarios, los dos defienden la misma idea cada uno a su manera, y el segundo además completa al primero, siendo más cínico si cabe.

.

Texto 1.

“Arribando” (o Un cínico desafecto social)

Andaba llegando donde uno está a salvo, donde uno cree que ya puede tomarse un respiro, que no descansar, en este vivir nunca uno puede bajar la guardia y echarse a dormir y reposar. Allí en ese lugar todo se ve mejor, todo parece teñido de otro color, el color del barro ya no forma parte de su horizonte, o al menos él lo ve así, y en ese momento de deleite por estar alcanzando aquel destino, pensando en esa pausa que se podrá tomar, evalúa ese transitar y mientras arriba, va recordando la serie inglesa “Arriba y Abajo” y de lo que le marcó ver en televisión el reflejo de esa sociedad de principios del siglo XX en Inglaterra. Él a su alrededor no veía esas diferencias, todos eran iguales.

Desde entonces siempre pensó en estar del lado de los de abajo, del lado de los desfavorecidos, era claro que este deseo de estar con ellos se debía a la cuna de la que provenía, totalmente proletaria, pero quería estar con ellos siendo de los de arriba para cambiar las cosas, teniendo lo bueno de aquella otra planta, pensaba que la desdicha de unos no puede ni debe ser y servir para la gloria de otros. Hoy aquella época de la serie se le muestra muy similar a esta, cada vez hay más diferencias entre los de arriba y los de abajo. Con el paso de los días a los de arriba se los ve más altos y lejanos, y los de abajo están más hundidos sin ver cielo ni salida. El de arriba pisa y el de abajo es pisado. El de abajo aguanta al de arriba y el de arriba lo ve como normal y necesario, es su función, se dicen, si no para qué fueron creados, sostener al prepotente, al empresario, y si le molesta debe dejar a otro paso, para sostener y ser pisado.

Con el transcurrir del tiempo había tomado una determinación, más pronto que tarde debía conseguir aquello que anhelaba desde esa infancia lejana. Hacer cumplir el sueño latente desde ese abajo, el sueño de tantos y tantos iguales como él, que por una cosa u otra no lo consiguieron y se fueron quedando por el camino, por las trabas y las trampas que no supieron esquivar, por los medios que tuvieron a su alcance y no supieron manejar y utilizar correctamente, en su beneficio.

Llevaba varios días deambulando, no encontrando lo que buscaba, sabía que el tiempo iba en su contra y que se le acababa, se estaba desesperando, ya empezaba a dudar si obtendría resultados, iba entrando en una edad en la que era mejor empezar a tener las cosa mejor atadas, un futuro. Pero incluso en los momentos de duda no cejó en su lucha por ser buen ciudadano. No dejando de asistir a las manifestaciones, en todas ellas en busca de apoyar a sus ideales e ideario, y de afianzarse en sus convicciones con buenos palos, para poner a cada uno en su sitio. No entiende como el problema cada vez aumenta en tamaño, cada uno debería saber cuál es su lugar en la sociedad, y lo suyo fue un accidente que debe reparar. Sólo le llega ruido, todo está turbado y emponzoñado por las noticias que llegan amplificadas por las antenas de radios y televisiones.

Desde que su amigo le dio el contacto y en la entrevista le dijeron que se preparase bien, estaba nervioso.  No encontraba lo necesario para afrontar el reto y llegar preparado a ese lugar que le ofrecían, se preguntaba si lo conseguiría. Cínicamente sonrió frente aquel escaparate, por fin creyó haber encontrado la solución a este debate que arrastra desde niño, por fin encontró el elemento necesario, encontró el calzado tan ansiado, ese que evita mancharte y sentir lo pateado cuando tus pisadas salpican al apretar con ahínco. Son robustas y fuertes y duras, con buena suela de agarre, listas para no resbalar, listas para poder trepar y alcanzar la cima, siente que esa es la solución perfecta, mantenerse bien erguido, sin duda encontró el camino. La luz y las nubes que podrían desaparecer a su alrededor si se consintiese no vencer, si no tuviese bien claro donde tiene su sitio, dejaron de ser un horizonte cercano y posible, al fin tiene las botas para pisar y jamás ser pisado, y conseguir olvidarse de su pasado. Allí arriba siempre se está y se estará mejor que abajo. Él ya está en la cima, arriba, y los de abajo serán bien pisados.

.

.

Texto 2.

«Meritoneando” o (Un desafecto político-social)

Me ando meando a los demás,

arribando y subiendo en la suciedad,

perdón quise decir sociedad,

medrando pisando a los demás,

robando al prójimo que me ayudó

a dejar de ayunar.

De méritos ando,

alabando a quién convenga,

palmeando las espaldas

de lucrosas amistades que devengan.

Quitando ando los beneficios del bienestar,

culpando a todos los demás

de los desvaríos que voy a insuflar.

Odiando la igualdad me ando,

si no saben que hay diferentes cunas

que les voy a contar,

que no entiendan que deben existir

para que yo pueda volar.

Orinando me ando para marcar

mi corralito, no se vayan a equivocar.

Arribando me ando,

dónde mejor se va a estar.

.

.

.

.     *Todos tenemos un ideario, que cínicos muchos traicionan para sobrevivir y medrar. Hoy para los textos utilizo el vídeo de Love of lesbian …. y ese ruido que aceptamos como verdad…

«Wio, antenas y pijamas«

Love of lesbian. La noche eterna-los días no vividos

.     ** NA: Publicado originalmente el 26 de Marzo de 2013. Hoy recibe una segunda oportunidad a diez años vista de aquel momento ilusionante de “Movimiento 15M”, para no olvidar que aún se puede.