Flanagan, el Apicarium RX2000 y Wall-And

… Lo aprieta contra su pecho tan fuerte que le hace daño, o será el miedo que le atenaza y le produce ese dolor, quizás está teniendo un infarto. Este va a ser el fin de su existencia; -Joder!!!

Siempre soñó con morir sin trauma, plácidamente, sin enterarse de ese momento fatídico, y ahora resulta que su fin le está llegando de frente y bien a la vista. Se va a ahogar. Como muchas cosas en su vida, decidió tarde aprender a nadar, lleva unos meses sólo dando clases, y sabe perfectamente que no va a tener ni una oportunidad en cuanto llegue a ese azul que se aproximaba más deprisa de lo deseado.

Con un poco de suerte en el impacto queda sin sentido y así esa asfixia, no le resultará tan angustiosa como le pasa en clase cuando traga agua. Y pensar que toda esta locura de los últimos días y esté trágico final es debido a unas abejas, bueno mejor dicho a una abeja que es la que queda viva.

-Porque no haría caso a Merikeit cuando me dijo que las entregase, que al fin y al cabo él no era ningún un superhéroe que debiera salvar a la humanidad. Siempre la quise y pocas veces se lo demostré, y ya no volveré a verla.

Siente un tremendo impacto; pummm!!, ploffff!! y un fuerte  golpe en el rostro, es el airbag. Ahora no ve nada, está algo noqueado, aturdido y desubicado.

-Pascualo, joder!!! Haz algo!!!

Pero Pascualo ha quedado maltrecho y no le va poder ayudar, aunque como último servicio le ha dado tiempo de dejar las ventanillas bajadas, así tendrá una oportunidad en el agua.

El Apicarium RX2000 fue un invento en memoria de su abuelo; amante de las abejas, la miel y el “sol y sombra”, y por él, aún debía luchar por salvar a esa abeja. Si lo saca del coche quedará flotando y al menos estará a salvo la abeja.

Trata de quitarse de encima el airbag y se desembaraza del cinturón, al agua ya ha inundado todo el coche y comienza a hundirse. De pronto, siente unas fuertes manos que tiran de él, y lo sacan en volandas del coche por la ventanilla y con él, el Apicarium RX2000. Cree que ya está muerto, y que algún demonio se lleva ya su cuerpo, (nunca llevó una vida como para ir al cielo).

Todo sucede muy rápido. Pronto está con la cabeza fuera del agua. Puede respirar, y siente que está flotando, pero enseguida se da cuenta que no flota si no que alguien le sostiene y sujeta, firme pero con delicadeza.

Al fin ve de que se trata. Es un bello hombre.

– Sí, es seguro, ya he muerto, no existe nadie tan bello en la Tierra, sin duda si fuera mujer perdería la cabeza por él, es más si esto es el fin, incluso yo creo que también. Clarísimo, no puede tratarse de un ser de esté mundo, tiene cuerpo de pez;  ¡¡es un Sireno!!.

-Hola, me llamo Wall-And, ¿estás bien?

No doy crédito, habla, y yo le contesto. – Sí, aunque creo que estoy alucinando por el accidente.

-Si es por mí, no alucinas. Existimos, al igual que las Sirenas. Vamos, te llevaré a un sitio en donde estarás a salvo tú y la abeja. Todos en el planeta dependemos de esta abeja y todos te debemos mucho Flanagan por plantar cara a esos desalmados.

FIN

Si quieres volver al inicio pincha aquí